jueves, 14 de febrero de 2013

Reflexion sobre la infancia

Anhelo profundamente no haber podido descubrir las culturas clásicas y las del pasado más remoto, desde mi más tierna infancia. Lo que yo hubiera dado en estos momentos por haberme interesado por leer y maravillandome con las grandiosas obras de los héroes más enigmáticos, valientes, leales, desinteresados y valerosos; cuyos relatos están plagados de hazañas, algunas con resultados triunfantes y otras trágicas.

Desconozco el porque de mi indecisión a la hora de no decantarme por el estudio y la reflexión desde una edad temprana.

No digo con esto, que sea lo único a lo que halla que encaminar a un niño para que la mente y aprenda. Hay mucho más que la cultura. El aprender a escuchar, a mantener la boca cerrada cuando no hay nada inteligente que decir. Enseñar a respetar a sus mayores, a elegir un ddeporte y seguir por esa ilustre senda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario